Jesé Rodríguez volvió a sentirse futbolista ocho meses y medio después. Una rotura de ligamento cruzado anterior en su rodilla derecha le hizo temer lo peor aquel 18 de marzo de 2014 y no es para menos, una lesión de ese tipo genera incertidumbre en si el futbolista será capaz de volver igual o si por el contrario mermará su carrera para siempre. Aún es pronto, pero frente al Cornellá Jesé dio muestras de haber superado por completo la lesión y tener la confianza suficiente para seguir con esa proyección que había mostrado hasta ahora.
Él mismo demostró esa confianza al terminar el partido “La afición me quiere mucho y yo quiero mucho a la afición. Se sufre, te pegas muchos meses así, una lesión como esta puede salir bien y puede salir mal, de momento va bien, todavía me falta ritmo físicamente y he echado de menos estar con el equipo. Son grandes jugadores y grandes personas, se han preocupado cada día por mí. Somos una familia».
La parte más difícil de recuperar para un jugador es la psicológica ya que tras volver de una lesión de ese tipo el temor más grande es que vuelva a ocurrir lo mismo. Son muchos días de soledad, encerrado en un gimnasio o trabajando en solitario mientras sus compañeros siguen con el ritmo de la temporada y en este caso, levantan títulos tan importantes como la Copa del Rey ante el FC. Barcelona o conquistan la Champions doce años después. Él fue parte de todo aquello pero quizás no lo sintió así.
Antes de aquel fatídico día, el jugador canario estaba deslumbrando cada partido con el balón en los pies. A pesar de tener delante a Cristiano Ronaldo, Bale o Benzema salía al campo y ponía ese toque osadía que le colocaba en el centro de las miradas. Era el suplente perfecto y un titular que todos esperaban. Garantía de resultados y de espectáculo. Es pronto para predecir si es el sucesor de alguien pero lo que sí está claro es que Jesé es un futbolista diferente, edición limitada y con derechos de autor para la cantera blanca. Si está centrado y es capaz de vivir día a día para el fútbol le esperan muchos años vistiendo la camiseta blanca situado entre los mejores jugadores del mundo.
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